El sentimiento de saber que una vida se está gestando en tu interior es algo único y maravilloso.
Así lo definía Carmen, quien junto Pepe se colocaba delante de nuestras cámaras para que esta etapa quedase inmortalizada de por vida.
La alegría rebosante de ambos hizo que pasásemos una tarde muy divertida y la complicidad que tenían hicieron el resto, ni directrices, ni posados ni nada, todo fluyó de manera natural. Entre risas, anécdotas y demás vivencias, Pepe nos deleitó llevándonos con su 4×4 a unos Paisajes preciosos cercanos a su entorno.
Gracias chicos por la confianza depositada, siempre es un placer aportar este granito de arena a vuestras historias.